Mamá

 Mamá, me gustaría que te cuidaras y pensarás más en ti.


Lo queramos o no, las madres son las primeras personas que están ahí, las que nos dan vida, y las que a lo largo de la vida están ahí para que todo nos vaya bien.

Sois nuestro mayor ejemplo y apoyo, nuestro modelo a seguir. 

Siempre estás cuidando a los demás, siempre quieres que todos estemos bien. Eres una cuidadora nata, pero se te ha olvidado cuidar a la persona más importante, a ti.

Eres nuestro ejemplo, y copiamos lo que hemos aprendido de ti; igual que todos hemos aprendido de nuestras familias y de lo que hemos vivido. Quiero darte las gracias por todo lo que has hecho por mí y por enseñarme los valores que tienes. 

Pero, hay algo que realmente me gustaría, y es que aprendieras a cuidarte a ti.

Para mí a veces es muy frustrante ver cómo cuidas de todos mientras tú te vas dejando en el camino. Me frustra porque me gustaría que miraras por ti, que tú estuvieras bien. Sé que es algo muy difícil sobre todo cuando es algo que forma parte de ti, y que llevas tanto tiempo manteniendo.

Yo ahora estoy en proceso de cambio, estoy intentando romper ese patrón y cuidarme más a mí, pero me da mucha tristeza ver cómo yo lo hago y tú te quedas atrás. Me gustaría que pudiéramos ir las dos de la mano en esta tarea, pero sé qué es algo en lo que yo no tengo decisión.

No sé si algún día tendré el valor de mostrarte estas palabras, pero es algo que siento de corazón.

Te quiero, Mamá. 

Aunque nunca lo diga.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Mi diario, mi salvación, mi vida oculta

Mi propia marca

Todo blogger tiene un bajón