Entradas

Mostrando entradas de 2024

Establecer límites

Poner límites es duro.  No solo por el hecho de que tienes que comunicarlos a los demás, sino porque ponerlos puede hacer que los demás se alejen de ti. Y si se alejan, tienes menos personas en tu vida y te puedes llegar a sentir más solo por su ausencia.  Y entonces tienes una lucha interna entre el miedo a quedarte solo y el establecer límites para tener paz mental. Decir "no" a los demás, decir algo que te ha molestado de la otra persona, cambiar de opinión con respecto a un plan... son cosas que nos cuestan decir; son límites que podemos poner a los demás pero que aún así nos cuesta. A unos más que a otros. Y me da tanto miedo que mis palabras puedan molestar a los demás que olvido si a mí me está molestando la situación o no. No me escucho, no me respeto. Al final, establecer límites con los demás es una muestra de respeto y cuidado hacia nosotros, aunque a veces nos duela establecerlos, pero están ahí para salvarnos de algo peor. No sabéis lo que me está doliendo, porqu

En primer lugar

Qué difícil es tenerse a uno en cuenta cuando no tienes ese hábito, cuando en tu vida nunca te enseñaron que eso era importante. Y tiene su gracia, porque cuando no te tienes en cuenta a ti mismo sientes que tu vida no tiene sentido, que estás perdido, que no eres feliz. Y un día tratas de buscar esa felicidad y ves que todo ese tiempo lo has hecho mal. Que te han enseñado a estar en un segundo plano, y ahora salir al frente es toda una batalla. Ahora te toca buscarte a ti, ponerte en primer lugar y darte importancia. Es cambiar hábitos, cambiar tu forma de pensar sobre ti y sobre el mundo que te rodea. Es vivir la vida de forma diferente. Y es difícil.  Y es fácil rendirse. Pero justo hoy me han dicho que ese duro camino valdrá la pena. Me encontraré, me querré.

Exprésate y libérate

 No sabes lo bien que sienta soltar todo eso que tienes dentro, sincerarte. Expresar lo que sientes, llorar, decir lo que piensas, es la mayor liberación que puedas tener. Te sientes libre y empiezas a aceptar eso que sientes, ese es el primer paso para sanar y sentirte mejor contigo mismo. No sabes lo bonito que es expresar cómo te sientes, tus miedos, tus inseguridades y que esa persona que es importante para ti te escuche y te comprenda, sin juicios, acompañándote y apoyándote en ese proceso. Ahora mismo estoy agradecida con esas personas, y no quiero perderlas de mi vida, pase lo que pase. A veces puede resultar muy doloroso al principio, pero luego es tan reconfortante. También me quiero dar gracias a mí misma por tener el valor de expresarme, a pesar del miedo, por dejarme ver vulnerable y rota. Ahora toca pensar en mí, trabajar en mí, aprender a quererme de verdad, a respetarme y a aceptarme. Pero no solo eso, tengo que aprender qué quiero, qué necesito, qué es bueno para mí y d

Decisiones

 Nuestra vida no es algo que ya esté escrito. Nuestra vida se compone de las decisiones que tomamos cada día. Una simple decisión puede cambiar tu día, o incluso tu vida. Hay decisiones que cuesta hacer; hay decisiones que son de valientes. Llevo mucho tiempo posponiendo decisiones que pueden suponer un cambio real y grande en mi vida, pero tengo tanto miedo... Tengo miedo a no saber qué vendrá después de esa decisión. De no saber si estaré peor después de haberla tomado. Porque tomar decisiones conlleva cambios; significa cambiar aquello a lo que estamos acostumbrados, y..., por suerte o por desgracia, somos personas de costumbres, está dentro de nuestra naturaleza. Necesitamos un orden, unos esquemas que nos guíen y nos ayuden a desenvolvernos en el mundo en el que vivimos. Pero hay veces que la costumbre no es la mejor opción, porque aunque somos seres de costumbres, las personas también cambiamos con las experiencias que vivimos; y quizás lo que hace un tiempo nos gustaba, ahora ya

Masoquista

"Cuando estoy bien contigo estoy tan bien que pienso que eso va a ser siempre así y que no va a cambiar;  pero luego, me desilusiono otra vez." No sé como explicarlo, pero te has vuelto tan importante en mi vida que a veces me da miedo.  Eres tan importante que espero yo también serlo para ti. Hay épocas en las que pienso que así es, que estamos en el mismo punto, que sientes lo mismo que yo, pero luego, a la siguiente semana, nada es igual que la semana anterior. Ya no me prestas tanta atención, siento que te cuesta hablarme, cuando pasamos tiempo juntos parece que estés pendiente a algo más en tu móvil... Ahí me haces sentir como si hubiera alguien más ocupando ese lugar importante en tu vida. Sé que no tengo ningún derecho a exigirte nada. Sé que nuestra situación es sub-realista. Sé que está socialmente mal visto. Pero, ¿qué le hago yo si florecieron estos sentimientos sin quererlo? De verdad, ojalá no haber comenzado a sentir esto por ti. Ojalá no fueras tan importante.

¿Está o ESTÁ?

 "Con el tiempo te vas dando cuenta quién está ahí y quién no." ¿Qué pasa cuando dejas de mantener una conversación con alguien? ¿La otra persona vuelve y te busca? ¿O en su lugar, no vuelve a iniciar una conversación contigo? ¿Te has fijado en cómo es la conversación que mantienes con la otra persona? ¿Te pregunta por ti, se interesa? ¿O en vez de eso se trata de un suceso de respuestas simples a preguntas, sin una conversación que realmente tenga trasfondo? No le estoy dando el peso de una relación a la otra persona. Nosotros mismos tenemos que ofrecer eso si realmente queremos mantener a la otra persona, pero a veces es bueno alejarse y observar. A veces nos sorprendemos a nosotros mismos sobre lo que parecía y lo que realmente no es. En muchas ocasiones somos nosotros mismos quienes no le damos la oportunidad a la otra persona de que esté en tu vida, y no estoy hablando de "estar" en el modo de: nos vemos de vez en cuando, echamos unas risas, y te hablo cuando m