Esta es mi vida y no otra

 ¿Será verdad eso de que "quien la sigue la consigue"? Hace menos de tres días siento como que todo lo que he ido haciendo durante muchos años, ahora cobra sentido, y todo se alinea. ¿Quién me iba a decir a mí que ese curso que hice me iba a abrir puertas después de más de un año?  ¿Quién me iba a decir que el haber hecho esas prácticas y haber conocido a cierta gente me iba a ayudar ahora?  ¿Quién me iba a decir que el haber aceptado este trabajo me fuera a dar la oportunidad de trabajar en algo mejor?... Y así podría seguir un buen rato más. Hoy parece que todas esas pequeñas piezas del puzzle están empezando a encajar. Es como si estuviera empezando una nueva etapa en mi vida, una etapa de cambio. Es como si estuviera viendo la llegada de mi nueva versión. Quiero seguir así, con esta energía. Quiero seguir trabajando en mí, y sobre todo quiero ser cada día una mejor versión de mí misma. Parece que hoy estoy empezando a ver la luz detrás del túnel. ¡Confiemos!

Desde pequeños solemos aprender a través de lo que ven nuestros ojos.  Hoy en día todo es muy visual, tenemos televisión, diferentes plataformas digitales, redes sociales. De tal modo que al final parece ser cierto eso de que "una imagen vale más que mil palabras". Todo ello nos enseña diferentes cosas, tanto consciente como inconscientemente. Muchas veces nos preguntamos qué está bien o qué está mal en una situación y lo que solemos hacer es mirar hacia afuera, hacia los demás, e incluso, buscamos una respuesta en el mundo digital.  ¿El problema? Que en las redes sociales y otras plataformas se muestran cuerpos normativos e ideales de belleza que, como su propio nombre indica, es ideal, no real. ¿Qué pasaría si un día vemos a alguien con un cuerpo que no es el ideal, en redes sociales o en la calle, llevando una prenda la cual nosotras no nos atrevíamos a vestir por cómo es nuestro cuerpo? Ella está siendo nuestro ejemplo para dar el paso a llevar esa prenda que tanto n

A principios de año me prometí no dedicarle mi tiempo y atención a aquellos que no me la daban de vuelta. Aplicando esto, me di cuenta de que hay personas, o al menos una, que han desaparecido de mi vida. Ahora siento que estoy otra vez en el mismo punto. Dedico más tiempo y atención a una persona de lo que ésta me dedica a mí. Es duro dejar ir a alguien, y duele mucho cuando realmente sientes que es importante para ti, pero a veces tenemos que pensar en qué es lo que más nos conviene a nosotros; lo que realmente nos merecemos.   Merecemos a alguien que realmente quiera estar en nuestra vida y se preocupe por estarlo.   Aún así, antes de tomar una decisión , debemos tener ciertas cosas en cuenta: Lo primero y más importante es expresarle a la otra persona cómo nos sentimos y lo que queremos en esa relación, ya esa de amistad o pareja. Debemos comunicarlo abiertamente porque la otra persona no nos lee la mente y no sabe qué es lo que necesitamos y/o queremos.  Una vez que hayamos hecho